A lo largo de nuestra existencia vamos coleccionando recuerdos, personas, historias, dolores, miedos que nos han impulsado a seguir adelante pero que en algún momento de nuestras vidas nos obligan a retroceder.
Las casas tienen trasteros, desvanes para guardar todo
aquello que dejamos de utilizar, o que representa un precedente en nuestra
vida, similarmente nosotros también tenemos un trastero imaginario donde vamos
colocando todo aquello que es parte de nuestro pasado, presente y futuro pero que
por alguna razón esta archivado.
Como saben hoy en día hay miles de libros que nos
indican que nunca debemos perder tiempo en el pasado ni en el futuro, que toda
nuestra energía debe estar concentrada en el presente, y no están desfasados de
lo correcto pero lo cierto es que nosotros vivimos de nuestros recuerdos sin
ellos fuéramos profundamente infelices por lo cual no es malo de vez en cuando
echar un vistazo a nuestros trastero, es saludable porque el mismo es un
recordatorio de nuestro paso por esta vida, lo nocivo seria que vivamos en el.
De hecho nuestro yo interior es muy rebelde e ira
cuantas veces quiera a visitar el trastero para eso tiene la ayuda del inconsciente,
así que no cuartemos felicidad a nuestro otro yo y dejemos de ser tan
correctos.
La clave de mantener un trastero libre de telarañas es
mantenerlo claro y ordenado para que nos siga impulsando al presente sin olvidar
la importancia de nuestro pasado.
ESCRITO POR K.Q.G
DERECHOS RESERVADOS