Tal vez sea
excesivo afirmar que estamos asistiendo al “fin de la historia”, pero no lo es
reconocer que la post-modernidad ha puesto en crisis la visión del mundo y de
la sociedad que nos dejaran el Racionalismo y la Ilustración.
El siglo XX
trajo consigo cambios estructurales que alteraron desde los roles tradicionales
de la mujer y el hombre hasta la concepción misma de la moral. En ese siglo
sucedieron muchas cosas magníficas y muchas otras atroces que los seres humanos
de siglos anteriores hubieran estimado absolutamente imposibles.
Nuestro
universo social, familiar y personal se ha alterado a tal grado que los
conceptos elaborados hace trescientos años o más, ya no nos sirven para
explicarnos qué somos ni el mundo en que vivimos.
Las ideas del
estado-nación; de la justicia como un acto meramente retributivo; de la
soberanía; de las garantías individuales como concesiones generosas o
conquistas irrenunciables, e incluso la convicción de que es necesario un
contrato social para que las cosas funcionen, adquieren día con día contornos
más vagos e imprecisos. Los cimientos de instituciones hasta no hace mucho
intocables, como sucede con el propio gobierno del Estado, empiezan a verse
corroídos por la desconfianza y la duda.
¿Hay quien se
atreva a poner su mano en el fuego por la policía, por los tribunales, por las
procuradurías, por las cárceles?
No es de
extrañar que se busque un punto de apoyo, algo de qué agarrarse, en medio de
este pantano de arenas movedizas. Olvidando las cegueras en que descansan las
respuestas fundamentalistas, lo único que puede darnos cierta tranquilidad y
cierta confianza -al menos mientras no lo refutamos-, son las modestas
recomendaciones de la ciencia que siquiera nos dicen, a veces, por dónde no hay
qué seguir.
No se trata, ni con mucho, de algo tan sencillo como
reemplazar los paradigmas del XVII y del XVIII por “nuevos” paradigmas. Sería
inútil sustituir un esquema conceptual por otro.
Lo que necesitamos es un
método que se adecue a las transformaciones o si se prefiere que “aprenda” con
ellas, filtrar el tsunami diario de informaciones que recibimos, al fin y al
cabo estamos en la era de la
comunicación y hay que ir decantando conceptos que necesitamos para entendernos,
para lograr que los esfuerzos comunes beneficien al mayor número y evitar la
guerra, el crimen, la crueldad.
K.Q.G
DERECHOS RESERVADOS
Creo que todos esos cambios y transformaciones son parte de nuestra evolución, siempre habrá cosas buenas y malas, la cuestión está en qué hace cada uno con ellas.
ResponderEliminarBuena entrada, también opino que la evolución forma parte de nosotros y como en todo habrá tantas cosas como buenas y malas, pero hay que evolucionar y transformarse
ResponderEliminarDesde luego que el mundo ha evolucionado y con la evolución lo que hemos perdido es ética. Eso es lo que está matando este mundo la falta de valores.
ResponderEliminarHola! Interesante entrada, la evolución y los cambios están siempre, hay que saber llevarlos y no dejarnos llevar por las malas acciones.
ResponderEliminarEs así, evolucionar obviamente es parte del ser humano, el "problema" es que en los ultimos tiempos en algunos aspectos se ha involucionado..y por decanto sólo lleva al caos..ojala que las proximas generaciones puedan ir modificandolo.
ResponderEliminarHace tiempo que pienso que la gente se rebela con facilidad por verdaderas tonterías. De todo se hace un mundo. Nada se puede decir, nada se puede juzgar, no se puede opinar con libertad...y sin embargo si se puede obrar como uno quiere y rebelarse. Ojala se encuentre un método para normalizarlo todo dónde vayamos todos a una en las cuestiones básicas de la vida con libertad para todos.
ResponderEliminarBueno dicen que el exceso de información es una desinformación y yo estoy totalmente de acuerdo. Que si quieres que una noticia se olvide lanza otra más fuerte segundos después... parecen barbaridades pero son técnicas de comunicación de hoy en día. Todo tiene que evolucionar aunque muchas cosas se queden en intentos ;)
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarExcelente post que te hace pensar en el mundo actual, yo no sé definir si hemos evolucionado para bien o para mal, porque en este mundo pasa cada atrocidad a diario y las noticias lo ponen y lo ponen para darse publicidad sin importarles nada mas que conseguir fama y así van cambiando por otra peor. La verdad que es lamentable
Saludos
Hola guapa
ResponderEliminarEs cierto que la sociedad ha avanzado en muchas cosas como puede ser la tecnología pero en otros no, parece que falta avanzar en cuanto a empatía y poder así mejorar realmente.
Claro que no se trata de copiar esquemas anteriores, sino aprender y avanzar, y pasa lo mismo con el derecho por supuesto
Un besazo
Un besazo
¡Hola!
ResponderEliminarHay gente que dice que la sociedad ha avanzado y evolucionado, y puede que tengan razón en algunos aspectos, pero en otros bastantes importantes, no. Por ejemplo, a veces somos un cero a la izquierda en empatía, tolerancia y comprensión (valores que yo considero fundamentales para la sociedad). Muchas personas con poder lo utilizan en beneficio propio y no para ayudar a los demás y construir un mundo mejor. Obviamente, no se trata de volver a atrás, ni mucho menos. Hay que trabajar juntos por el cambio y el avance.